Ficha Técnica
Guión: Matt Fraction, Jonathan Hickman
Dibujo: John Romita Jr., Olivier Coipel
Portada: Jim Cheung
Publicación original: Avengers Vs. X-Men #5-6 (2012). Marvel, Estados Unidos.
Publicación española: Los Vengadores Vs. La Patrulla-X #3 (2012). Panini Comics, España.
Sinopsis:
Los Vengadores y la Patrulla-X se enfrentan en la luna mientras el Fénix se acerca hacia ellos, en busca de Hope. Pero Iron Man posee un as en la manga que afectará lo suficiente a la entidad cósmica como para hacerle daño, y que, debido a ello, busque un nuevo huésped muy diferente a Hope. Pero no sólo será una persona la que contenga el poder del Fénix, sino cinco. Llegan los Cinco de Fénix.
Reseña:
Ha llegado la hora de la verdad. En este número tiene lugar un punto de inflexión que cambia la historia que se nos venía contando de arriba abajo. Y no me refiero sólo al cambio de dibujante; se va John Romita Jr. (Amazing Spider-Man, Kick-Ass) y entra Olivier Coipel (Asedio, Thor), lo que marca, junto con lo que les ocurre a algunos de los mutantes, el fin del primer acto de la mini-serie y el comienzo del segundo acto, donde el objetivo de ambos grupos de superhéroes ya no es encontrar y mantener en su bando a Hope, sino algo muy diferente.
Y es que, es al final del primer cómic USA de este número español donde la trama da un vuelco. El número empieza tal y donde lo dejamos, con un equipo de X-Men enfrentándose a un equipo de vengadores en la luna, mientras el Fénix se acerca, teniendo a Hope al alcance de sus flamígeras garras. Pero los Vengadores tienen un plan formado a raíz de diferentes hechos vistos, por ejemplo, en "Vengadores Secretos", y es, nada más y nada menos, que asesinar el Fénix. Tony Stark, también conocido como Iron Man, ataca entonces a la entidad con su ingenio. Parece que la ha matado pero, en vez de eso, ha desperdigado su poder, que se contiene nada más y nada menos que en los cinco mutantes que se encuentran en la luna: Coloso, Magik, Namor, Emma Frost y Cíclope. Cinco de los mutantes más peligrosos y listos para crear un nuevo mundo para su especie, consiguen entonces poderes cósmicos, los del Fénix, que gente como Lobezno sabe perfectamente que pueden convertir a la mejor de las personas en el más terrible de los villanos.
Y es entonces cuando la historia toma un nuevo rumbo. Ahora, dichos mutantes, se hacen llamar los Cinco de Fénix, y van a cambiar el mundo para mejor, les guste o no a las personas que viven en él. Sin embargo, los Vengadores no se van a quedar quietos viendo cómo se corrompen, porque es lo que todos esperan, porque, si ocurrió con Jean Grey, ¿por qué no ocurriría con los inestables Cíclope y Coloso, sin contar a Emma Frost, una antigua villana, o Magik y sus demonio internos y no tan internos? Es hora de planear cómo detener a los Cinco de Fénix y, de paso, rescatar a Hope de sus manos, el único recipiente auténtico del Fénix que podría manejarlo.
De este modo, lo que podría haber sido una trama lineal donde vengadores y hombres-x se pegasen por Hope hasta que esta se convirtiese en Fénix Oscuro, contra el que deberían unirse los héroes, y sería entonces cuando volverían a formarse los lazos de amistad entre héroes, se convierte en algo que va para arriba, evoluciona y, al mismo tiempo, enlaza con todo lo que se nos ha ido contando en Marvel sobre los mutantes en los últimos años. Incluso el futuro que plantean los Cinco de Fénix, podría ser perfectamente el que ya vimos en "Dinastía de M", aunque con Cíclope en el lugar de Magneto.
Todo lo relacionado con los Cinco de Fénix es lo que eleva la calidad del cómic con respecto a la del anterior número. No estamos sólo ante un número donde los héroes, en este caso los Vengadores, se las ven canutas contra antiguos amigos que han adquirido poderes divinos, sino con una historia que tiene más detrás, dilemas morales y éticos que sobrevuelan los cómics desde hace tiempo, y que sirven para plantear dudas entre los protagonistas. Ya lo dicen Pantera Negra y la Bestia, dos de los vengadores más reflexivos dos de los personajes más inteligentes de Marvel: ¿qué han hecho los Cinco de Fénix hasta el momento, aparte de intentar arreglar el planeta? Los demás vengadores lo tienen claro, no lo han hecho aún, pero lo harán. Están tan seguros de ello, que asustan a sus propios compañeros.
Las dudas, las preguntas están ahí, las mismas que surgieron en "Civil War", alrededor tanto de Iron Man como del Capitán América. En este caso, con la aparición de los Cinco de Fénix, la historia va por otro camino que en la anteriormente mencionada, pero surgen cuestiones muy parecidas alrededor de lo que ocurre. Conceptos, cuestiones, preguntas que eran muy, muy comunes en otra serie comiquera, aunque no de Marvel: "The Authority". Si recordamos, en dicha serie, se nos presentaba a un violento grupo de superhéroes que, en vez de esperar a que los malos atacasen, se dedicaban a intentar arreglar las cosas, es decir, acabar con el hambre en el mundo, desmontar armas nucleares, y dejarles claro a los gobiernos del mundo que no se andarían con tonterías. Por supuesto, se ganaron muchos enemigos, entre ellos, a héroes que no estaban de acuerdo con su forma de proceder.
Y eso es lo que pasa en este cómic. Días después del nacimiento de los Cinco de Fénix, han empezado a cambiar el mundo; llevan agua a zonas áridas, llevan comida a lugares con hambruna, etc, etc. No tardan en confabularse contra los diferentes ejércitos desarmandolos, intentando hacer del mundo un lugar más seguro, especialmente para los de su especie. Pero los Vengadores, salvo unos pocos, no confían demasiado en lo que están provocando. ¿Quiénes son para cambiar las cosas de manera tan rápida? Además, muchos conocen lo que el Fénix es capaz de hacer. Ya vieron convertirse en un monstruo de poder ilimitado a Jean Grey, ¿qué podría hacer con gente como Cíclope? Sin contar con que tienen a Hope secuestrada contra su voluntad, aunque digan que puede irse cuando quiera. El fin del cómic deja claro que, pese a la pequeña victoria de los Vengadores, los Cinco de Fénix no van a quedarse de brazos cruzados, sino que comenzarán a perseguirles, dándoles caza. ¿A qué recuerda esto?
Exacto. No sólo el futuro de "Dinastía de M" empieza a verse claro, sino otros muchos futuros donde los mutantes cazan a los humanos, después de haber aniquilado a los principales superhéroes. Las piezas empiezan a conectar, lo que da una sensación de continuo suspense, de mal rollo que funciona a las mil maravillas en una mini-serie que, hasta el momento, parecía que sólo iba a ir de leches entre superhéroes (una especie de "Civil War II"). Mini-serie que era, prácticamente inevitable si repasamos todo lo que han vivido los mutantes en los últimos tiempos, todos los cambios que han sufrido, especialmente los Cinco de Fénix.
Desde los tiempos de Grant Morrison (Batman, Los Invisibles), e incluso antes, Cíclope ha ido evolucionando. Ha pasado de un anodino personaje, a un tipo que hacía lo que debía hacer para proteger a los suyos, sobrevivir y, sobre todo, salvar a la especie mutante. Todos los pasos que ha ido dando desde entonces, le han llevado a convertirse en algo peor que Magneto, que palidece a su lado, en poder y en guía de otros mutantes, y más ahora, cuando Scott Summers tiene poderes cuasi-divinos. Hay acontecimientos que han acelerado esa evolución de Cíclope, como por ejemplo, el "No más mutantes" de la Bruja Escarlata, el repetido acoso de los enemigos de los mutantes que ven cada vez más cerca su extinción, o la creación de los violentos X-Force.
Algo parecido se podría decir de quienes le acompañan, aunque no de forma tan exagerada. Algunos ni siquiera han seguido sus pasos, como Emma Frost, enemiga de los X-Men desde hace muchos años, ha ido transformándose en algo diferente, y todo empezó con la etapa Morrison, y su noviazgo con el mismo Scott Summers. En cuanto a Namor, poco podemos decir de él, ya que siempre ha sido un personaje que se movía en la cuerda floja entre maldad y bondad; se ha llegado a unir a diferentes villanos para luchar contra los Vengadores, cuando no ha formado parte de ellos.
Con Coloco y Magik las cosas han sido parecidas, aunque no de manera tan extrema. Coloso ha terminado de perder el norte cuando se ha visto poseído por Cyttorak, durante "Miedo Encarnado", y Magik hace ya años que no está muy en sus cabales. Imaginarlos con el poder del Fénix o, al menos, con parte de él, da qué pensar. ¿Quizás sean Emma Frost y Namor los únicos con cabeza del grupo? ¿Sólo Emma? ¿Podrá hacer algo para detener a Cíclope cuando haga falta? Bueno, nadie ha mencionado que también tenemos a la Bruja Escarlata en tal berenjenal. Alguien de su poder, y más siendo mutante, mujer-x y vengadora, no podía quedarse al margen, y menos cuando hace ya tiempo que ha sido recuperada para Marvel, después de haber pasado mucho más tiempo desaparecida tras "Dinastía de M".
En los guiones en esta ocasión tenemos a Matt Fraction (Miedo Encarnado, El invencible Iron Man) y a Jonathan Hickman (Guerreros Secretos, Los Cuatro Fantásticos). Sale ganando el segundo por encima del primero, quizás porque tiene la parte más interesante del cómic, mientras que Fraction es el encargado de la parte con más acción, es decir, todo el segmento de los héroes en la luna. A Hickman le cae encima la perita en dulce que es mostrar los primeros sucesos con los Cinco de Fénix, a la vez que plantea las primeras cuestiones morales y éticas entre los diferentes vengadores, hasta la llegada de la Bruja Escarlata, y el final del cómic, con un cliffhanger que promete mucho.
En cuanto al dibujo, como decía al principio, se nos va John Romita Jr., uno de mis dibujantes favoritos. Termina este primer acto con notable; impresionantes sus últimas páginas del cómic, especialmente en las que Iron Man intenta matar al Fénix, y la primera aparición de los Cinco de Fénix. Olivier Coipel, otro de mis favoritos, gana por poco el combate, aunque no haya tal, pues su estilo más europeo, y menos clásico que el de Romita Jr. apenas es comparable, al menos, no justamente. Sin duda, hace junto a Hickman que el comienzo del segundo acto de la mini-serie sea algo muy, muy bueno.
Si hablamos de las portadas, Jim Cheung (Jóvenes Vengadores, Los Nuevos Vengadores) sigue en plena forma; de excelente se puede clasificar su portada de los Cinco del Fénix. En cuanto a las alternativas, a destacar la de Ryan Stegman (Araña Escarlata) con Hope de protagonista, bastante bonita, la de Olivier Coipel con Thor y Tormenta enfrentándose (algo que no vemos en el cómic), y la de Nick Bradshaw (Lobezno y la Patrulla-X) con la Bruja Escarlata en primera plana, al más puro estilo Arthur Adams.
En resumen, la historia da un nuevo giro, para mejor. Quizás lo de héroes convertidos en villanos poderosisimos ya está muy visto últimamente (Asedio, Civil War, Dinastía de M), pero dejando eso a un lado, es la evolución lógica de lo que veníamos leyendo. No sólo vamos a tener acción por un tubo, sino una trama de fondo, bien construida sobre preguntas incomodas y dilemas morales y éticos no sólo en dirección a los protagonistas, sino también en cuanto al lector, lo que nos sumerge más aún en lo que se nos está contando. Empieza el segundo acto de la mini-serie pero que muy, muy bien.
Nota: 8,5/10
Dibujo: John Romita Jr., Olivier Coipel
Portada: Jim Cheung
Publicación original: Avengers Vs. X-Men #5-6 (2012). Marvel, Estados Unidos.
Publicación española: Los Vengadores Vs. La Patrulla-X #3 (2012). Panini Comics, España.
Sinopsis:
Los Vengadores y la Patrulla-X se enfrentan en la luna mientras el Fénix se acerca hacia ellos, en busca de Hope. Pero Iron Man posee un as en la manga que afectará lo suficiente a la entidad cósmica como para hacerle daño, y que, debido a ello, busque un nuevo huésped muy diferente a Hope. Pero no sólo será una persona la que contenga el poder del Fénix, sino cinco. Llegan los Cinco de Fénix.
Reseña:
Ha llegado la hora de la verdad. En este número tiene lugar un punto de inflexión que cambia la historia que se nos venía contando de arriba abajo. Y no me refiero sólo al cambio de dibujante; se va John Romita Jr. (Amazing Spider-Man, Kick-Ass) y entra Olivier Coipel (Asedio, Thor), lo que marca, junto con lo que les ocurre a algunos de los mutantes, el fin del primer acto de la mini-serie y el comienzo del segundo acto, donde el objetivo de ambos grupos de superhéroes ya no es encontrar y mantener en su bando a Hope, sino algo muy diferente.
Y es que, es al final del primer cómic USA de este número español donde la trama da un vuelco. El número empieza tal y donde lo dejamos, con un equipo de X-Men enfrentándose a un equipo de vengadores en la luna, mientras el Fénix se acerca, teniendo a Hope al alcance de sus flamígeras garras. Pero los Vengadores tienen un plan formado a raíz de diferentes hechos vistos, por ejemplo, en "Vengadores Secretos", y es, nada más y nada menos, que asesinar el Fénix. Tony Stark, también conocido como Iron Man, ataca entonces a la entidad con su ingenio. Parece que la ha matado pero, en vez de eso, ha desperdigado su poder, que se contiene nada más y nada menos que en los cinco mutantes que se encuentran en la luna: Coloso, Magik, Namor, Emma Frost y Cíclope. Cinco de los mutantes más peligrosos y listos para crear un nuevo mundo para su especie, consiguen entonces poderes cósmicos, los del Fénix, que gente como Lobezno sabe perfectamente que pueden convertir a la mejor de las personas en el más terrible de los villanos.
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| La pelea en la luna no va a acabar muy bien |
Y es entonces cuando la historia toma un nuevo rumbo. Ahora, dichos mutantes, se hacen llamar los Cinco de Fénix, y van a cambiar el mundo para mejor, les guste o no a las personas que viven en él. Sin embargo, los Vengadores no se van a quedar quietos viendo cómo se corrompen, porque es lo que todos esperan, porque, si ocurrió con Jean Grey, ¿por qué no ocurriría con los inestables Cíclope y Coloso, sin contar a Emma Frost, una antigua villana, o Magik y sus demonio internos y no tan internos? Es hora de planear cómo detener a los Cinco de Fénix y, de paso, rescatar a Hope de sus manos, el único recipiente auténtico del Fénix que podría manejarlo.
De este modo, lo que podría haber sido una trama lineal donde vengadores y hombres-x se pegasen por Hope hasta que esta se convirtiese en Fénix Oscuro, contra el que deberían unirse los héroes, y sería entonces cuando volverían a formarse los lazos de amistad entre héroes, se convierte en algo que va para arriba, evoluciona y, al mismo tiempo, enlaza con todo lo que se nos ha ido contando en Marvel sobre los mutantes en los últimos años. Incluso el futuro que plantean los Cinco de Fénix, podría ser perfectamente el que ya vimos en "Dinastía de M", aunque con Cíclope en el lugar de Magneto.
Todo lo relacionado con los Cinco de Fénix es lo que eleva la calidad del cómic con respecto a la del anterior número. No estamos sólo ante un número donde los héroes, en este caso los Vengadores, se las ven canutas contra antiguos amigos que han adquirido poderes divinos, sino con una historia que tiene más detrás, dilemas morales y éticos que sobrevuelan los cómics desde hace tiempo, y que sirven para plantear dudas entre los protagonistas. Ya lo dicen Pantera Negra y la Bestia, dos de los vengadores más reflexivos dos de los personajes más inteligentes de Marvel: ¿qué han hecho los Cinco de Fénix hasta el momento, aparte de intentar arreglar el planeta? Los demás vengadores lo tienen claro, no lo han hecho aún, pero lo harán. Están tan seguros de ello, que asustan a sus propios compañeros.
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| ¡Llegan los Cinco de Fénix! |
Las dudas, las preguntas están ahí, las mismas que surgieron en "Civil War", alrededor tanto de Iron Man como del Capitán América. En este caso, con la aparición de los Cinco de Fénix, la historia va por otro camino que en la anteriormente mencionada, pero surgen cuestiones muy parecidas alrededor de lo que ocurre. Conceptos, cuestiones, preguntas que eran muy, muy comunes en otra serie comiquera, aunque no de Marvel: "The Authority". Si recordamos, en dicha serie, se nos presentaba a un violento grupo de superhéroes que, en vez de esperar a que los malos atacasen, se dedicaban a intentar arreglar las cosas, es decir, acabar con el hambre en el mundo, desmontar armas nucleares, y dejarles claro a los gobiernos del mundo que no se andarían con tonterías. Por supuesto, se ganaron muchos enemigos, entre ellos, a héroes que no estaban de acuerdo con su forma de proceder.
Y eso es lo que pasa en este cómic. Días después del nacimiento de los Cinco de Fénix, han empezado a cambiar el mundo; llevan agua a zonas áridas, llevan comida a lugares con hambruna, etc, etc. No tardan en confabularse contra los diferentes ejércitos desarmandolos, intentando hacer del mundo un lugar más seguro, especialmente para los de su especie. Pero los Vengadores, salvo unos pocos, no confían demasiado en lo que están provocando. ¿Quiénes son para cambiar las cosas de manera tan rápida? Además, muchos conocen lo que el Fénix es capaz de hacer. Ya vieron convertirse en un monstruo de poder ilimitado a Jean Grey, ¿qué podría hacer con gente como Cíclope? Sin contar con que tienen a Hope secuestrada contra su voluntad, aunque digan que puede irse cuando quiera. El fin del cómic deja claro que, pese a la pequeña victoria de los Vengadores, los Cinco de Fénix no van a quedarse de brazos cruzados, sino que comenzarán a perseguirles, dándoles caza. ¿A qué recuerda esto?
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| Magneto presenta Utopía |
Exacto. No sólo el futuro de "Dinastía de M" empieza a verse claro, sino otros muchos futuros donde los mutantes cazan a los humanos, después de haber aniquilado a los principales superhéroes. Las piezas empiezan a conectar, lo que da una sensación de continuo suspense, de mal rollo que funciona a las mil maravillas en una mini-serie que, hasta el momento, parecía que sólo iba a ir de leches entre superhéroes (una especie de "Civil War II"). Mini-serie que era, prácticamente inevitable si repasamos todo lo que han vivido los mutantes en los últimos tiempos, todos los cambios que han sufrido, especialmente los Cinco de Fénix.
Desde los tiempos de Grant Morrison (Batman, Los Invisibles), e incluso antes, Cíclope ha ido evolucionando. Ha pasado de un anodino personaje, a un tipo que hacía lo que debía hacer para proteger a los suyos, sobrevivir y, sobre todo, salvar a la especie mutante. Todos los pasos que ha ido dando desde entonces, le han llevado a convertirse en algo peor que Magneto, que palidece a su lado, en poder y en guía de otros mutantes, y más ahora, cuando Scott Summers tiene poderes cuasi-divinos. Hay acontecimientos que han acelerado esa evolución de Cíclope, como por ejemplo, el "No más mutantes" de la Bruja Escarlata, el repetido acoso de los enemigos de los mutantes que ven cada vez más cerca su extinción, o la creación de los violentos X-Force.
Algo parecido se podría decir de quienes le acompañan, aunque no de forma tan exagerada. Algunos ni siquiera han seguido sus pasos, como Emma Frost, enemiga de los X-Men desde hace muchos años, ha ido transformándose en algo diferente, y todo empezó con la etapa Morrison, y su noviazgo con el mismo Scott Summers. En cuanto a Namor, poco podemos decir de él, ya que siempre ha sido un personaje que se movía en la cuerda floja entre maldad y bondad; se ha llegado a unir a diferentes villanos para luchar contra los Vengadores, cuando no ha formado parte de ellos.
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| Los poderosos Cíclope y Emma Frost contra los Vengadores |
Con Coloco y Magik las cosas han sido parecidas, aunque no de manera tan extrema. Coloso ha terminado de perder el norte cuando se ha visto poseído por Cyttorak, durante "Miedo Encarnado", y Magik hace ya años que no está muy en sus cabales. Imaginarlos con el poder del Fénix o, al menos, con parte de él, da qué pensar. ¿Quizás sean Emma Frost y Namor los únicos con cabeza del grupo? ¿Sólo Emma? ¿Podrá hacer algo para detener a Cíclope cuando haga falta? Bueno, nadie ha mencionado que también tenemos a la Bruja Escarlata en tal berenjenal. Alguien de su poder, y más siendo mutante, mujer-x y vengadora, no podía quedarse al margen, y menos cuando hace ya tiempo que ha sido recuperada para Marvel, después de haber pasado mucho más tiempo desaparecida tras "Dinastía de M".
En los guiones en esta ocasión tenemos a Matt Fraction (Miedo Encarnado, El invencible Iron Man) y a Jonathan Hickman (Guerreros Secretos, Los Cuatro Fantásticos). Sale ganando el segundo por encima del primero, quizás porque tiene la parte más interesante del cómic, mientras que Fraction es el encargado de la parte con más acción, es decir, todo el segmento de los héroes en la luna. A Hickman le cae encima la perita en dulce que es mostrar los primeros sucesos con los Cinco de Fénix, a la vez que plantea las primeras cuestiones morales y éticas entre los diferentes vengadores, hasta la llegada de la Bruja Escarlata, y el final del cómic, con un cliffhanger que promete mucho.
En cuanto al dibujo, como decía al principio, se nos va John Romita Jr., uno de mis dibujantes favoritos. Termina este primer acto con notable; impresionantes sus últimas páginas del cómic, especialmente en las que Iron Man intenta matar al Fénix, y la primera aparición de los Cinco de Fénix. Olivier Coipel, otro de mis favoritos, gana por poco el combate, aunque no haya tal, pues su estilo más europeo, y menos clásico que el de Romita Jr. apenas es comparable, al menos, no justamente. Sin duda, hace junto a Hickman que el comienzo del segundo acto de la mini-serie sea algo muy, muy bueno.
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| Portada alternativa de Ryan Stegman para el "Avengers Vs. X-Men #5" |
Si hablamos de las portadas, Jim Cheung (Jóvenes Vengadores, Los Nuevos Vengadores) sigue en plena forma; de excelente se puede clasificar su portada de los Cinco del Fénix. En cuanto a las alternativas, a destacar la de Ryan Stegman (Araña Escarlata) con Hope de protagonista, bastante bonita, la de Olivier Coipel con Thor y Tormenta enfrentándose (algo que no vemos en el cómic), y la de Nick Bradshaw (Lobezno y la Patrulla-X) con la Bruja Escarlata en primera plana, al más puro estilo Arthur Adams.
En resumen, la historia da un nuevo giro, para mejor. Quizás lo de héroes convertidos en villanos poderosisimos ya está muy visto últimamente (Asedio, Civil War, Dinastía de M), pero dejando eso a un lado, es la evolución lógica de lo que veníamos leyendo. No sólo vamos a tener acción por un tubo, sino una trama de fondo, bien construida sobre preguntas incomodas y dilemas morales y éticos no sólo en dirección a los protagonistas, sino también en cuanto al lector, lo que nos sumerge más aún en lo que se nos está contando. Empieza el segundo acto de la mini-serie pero que muy, muy bien.
Nota: 8,5/10
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